El consumo alimentario rozó los 700 kilos por persona al año en 2022, con una subida de casi el 3% en el gasto
– Según el Informe de Consumo Alimentario en España 2022, presentado por el Gobierno este jueves
MADRID, 29 (SERVIMEDIA)
En 2022, el gasto total en alimentación ascendió un 2,7% respecto a 2021, mientras que bajó un 7,1% el volumen comprado, lo que situó el consumo per cápita en 698,50 kilos/litros por persona y año.
Así lo refleja el Informe de Consumo Alimentario en España 2022, presentado este jueves por el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, en una rueda de prensa en la que destacó la rapidez y comodidad como «valores al alza» en las cocinas españolas, mientras se «recupera» el consumo fuera del hogar.
En concreto, según sus cálculos, el gasto total en alimentos y bebidas en España se situó en 107.780 millones de euros el año pasado, un 2,7% por encima del de 2021 y un 1,1 % superior al de 2019 -año de referencia prepandemia-, debido «en parte» al incremento de los precios, pero también a la recuperación del consumo fuera de casa.
Por su parte, el volumen total consumido se redujo un 7,1% respecto a lo comprado el año anterior y fue un 8,1% inferior que el de 2019, al situarse en 30.946 millones de kilos/litros, «en gran medida, por ese trasvase del consumo de dentro a fuera del hogar», según el Ejecutivo, que indicó que la «mayoría» de la ingesta de alimentos y bebidas se produce en el ámbito doméstico, que representa el 87,2% en volumen y que más de dos tercios del gasto (68,6%) se realiza para llenar la nevera y la despensa de casa.
En 2022, el consumo per cápita (698,5 kilos/litros por persona y año) se mantuvo por debajo del registrado en los tres años anteriores, mientras que el gasto per cápita por la compra de alimentos y bebidas (2.582 euros por persona y año) creció respecto a 2021 y 2020, pero se mantuvo aún por debajo de los niveles de 2019.
En el hogar tienen «gran peso» los alimentos frescos, que representan el 37,3% de la cesta de la compra en volumen y el 40,7% en valor y, según el Gobierno, el consumidor español es ahora «más consciente» del valor de tener un alimento en su nevera y «del trabajo que hay detrás», por lo que «su compra es más responsable y selectiva y desperdicia menos».
CONSUMO DOMÉSTICO
El gasto en los hogares españoles en alimentación y bebidas se situó en 2022 en 73.893 millones de euros, con un ligero descenso de 0,9% respecto al ejercicio anterior, motivado por el aumento de los precios, ya que se pagó un 8,7% más por cada kilo o litro de alimentos o bebidas que en 2021 y el gasto medio por persona fue de unos 1.597 euros.
Los productos de mayor volumen en la cesta de la compra fueron la leche y los lácteos y las frutas y hortalizas frescas, que representan el 37%, si bien las carnes y pescados encabezan el presupuesto en alimentación, con el 31% del valor, pese a que en volumen rondan el 10%.
De media, cada persona realiza una ingesta aproximada de 583 kilos o litros dentro del hogar, lo que significa que el año pasado se consumieron alrededor de 55 kilos o litros menos que durante el año 2021.
Los consumidores españoles eligieron «preferentemente» el supermercado y el autoservicio para hacer sus compras, un formato que aumenta su cuota de volumen de mercado dos puntos, hasta el 49,5%, «muy por encima» de hipermercado, que, según los cálculos del Ejecutivo, alcanza el 12,8%.
Asimismo, la tienda descuento (13,7%) y la tradicional (12,7%) retroceden, mientras que la venta ‘online’ (2,3%) baja una décima, aunque aún está por encima del 1,6% que marcó en 2019.
CONSUMO FUERA DEL HOGAR
En paralelo, el informe destaca que el gasto realizado por los españoles fuera del hogar ascendió a 33.887 millones de euros, un 11,5% más que en 2021 y dedicaron el presupuesto más a consumir bebidas (58,4%) que alimentos (41,6%).
Así, el gasto medio per cápita ascendió a 984,51 euros, un 11,3% más que el año anterior, esto es unos 100 euros más por persona y año que en 2021, y el consumo en bares, cafeterías y cervecerías «se intensificó», a la vez que aumentaron las compras en hoteles y servicios de empresa.
De media, cada individuo consumió fuera del hogar la cantidad de 115 kilos o litros de productos de alimentación, el equivalente a 6,4 kilos o litros más que el año pasado.
HÁBITOS Y TENDENCIAS
En cuanto a hábitos y tendencias, el 93,4% de los españoles sigue desayunando en casa una media de seis veces a la semana y el 95,3% realiza comidas o cenas en casa un promedio de 10,4 veces a la semana.
Como novedad, con respecto a estudios anteriores se observa un descenso de la ingesta de proteína cárnica, muy consumida durante la pandemia y la etapa de restricciones, y una reducción del número de consumidores que podrían considerarse «plenamente omnívoros» en «beneficio» de flexitarianos, vegetarianos y veganos.
Según el avance de datos de 2023, entre enero y abril los kilos y litros acumulados que se han consumido retrocedieron un 2,65%, si bien, según las proyecciones, este descenso «se irá frenando con la paulatina moderación de los precios, que en las últimas semanas del semestre incluso se han reducido en algunas categorías».
MENOS DESPERDICIO ALIMENTARIO
Por lo que respecta al desperdicio alimentario, el año pasado los españoles tiraron a la basura 1.201 millones de kilos/litros de alimentos de bebidas sin consumir, un 6,2% menos que en el ejercicio previo, según el Informe del Desperdicio Alimentario en España 2022.
En concreto, cada español tiró de media a la basura 25,31 kilos/litros de alimentos el último ejercicio y el número de hogares que no desperdicia alimentos subió al 30% (26% en 2021) y fuera de casa más de la mitad de los consumidores no tira nada.
La subida de precios tras el comienzo de la guerra de Ucrania provocó, además, un descenso del volumen comprado para el hogar del 8,8% en relación con 2021, si bien a lo largo de 2022 el consumo de alimentos fuera del hogar creció un 11,5%.
Una de las consecuencias de este cambio de hábitos es el aumento del desperdicio de sobras de recetas y productos cocinados, que en 2020 suponían el 23,8% de los alimentos tirados a la basura en el hogar, y en 2022 pasaron a representar el 21,4%. Por el contrario, el desperdicio de alimentos comprados descendió nueve puntos, al pasar del 81,1% al 78,6%.
La mayor reducción de desperdicio se registró en frutas, verduras y hortalizas y la leche líquida. Por el contrario, aquellos alimentos en los que se realiza una «peor gestión» del aprovechamiento serían los embutidos (el desperdicio repuntó un 3,2%), platos preparados (5%) y pastas (9,5%).
