Fedea calcula que las rentas de más de 43.000 euros absorberán la mitad de la rebaja del IVA de los alimentos
MADRID, 20 (SERVIMEDIA)
Las rentas brutas superiores a 43.395 euros –el 40% de los hogares– asimilarán la mitad del coste que tendrá para el Estado la bajada del IVA de los alimentos básicos de la cesta de la compra, según Fedea, aunque esta medida tendrá un efecto «positivo» –y ligero– sobre la redistribución de la riqueza.
Así se recoge en un artículo publicado este viernes por la fundación, que estima que las rentas más altas (más de 215.000 euros) ahorrarán hasta 60,7 euros en las facturas de los supermercados, un importe que desciende hasta los 22,4 euros en los hogares con ingresos inferiores a 16.800 euros.
A pesar de esta diferencia de casi 40 euros, el estudio señala que el ahorro medio para las rentas más bajas es del 0,22%, mientras que para las más altas supone apenas un 0,02%. A su vez, sitúa el ahorro medio para los españoles en el 0,07%, lo que se traduce en 32,4 euros.
Con estas cifras, considera que la medida es «progresiva» a la hora de redistribuir la riqueza, aunque augura que tendrá «poca importancia» porque reducirá la desigualdad en tan solo un 0,01%, todo ello a cambio de un coste «innecesariamente elevado» que estima en hasta 700 millones de euros.
«Aunque es cierto que la reducción de los tipos reducido y superreducido es una medida que favorece más, en términos relativos, a las personas y hogares con menos renta; su coste es innecesariamente elevado, porque, en términos absolutos, la reducción beneficia más a las personas y hogares con rentas elevadas, que, seguramente, no necesitan esa ayuda», explica el informe.
Fedea cree que esta medida «puede no ser la más adecuada», pero reconoce que esta reducción temporal del IVA permite asegurar que sus efectos lleguen «inmediatamente» a todas las personas que necesiten esa ayuda en sus compras de bienes esenciales ante «la importante alza de precios» de los productos básicos de la cesta de la compra.
En este sentido, apunta que ayudas directas como el cheque de 200 euros que se dará a colectivos vulnerables son «más equitativas, eficientes, efectivas y baratas», pero solo llegarán a los que la soliciten –«y la experiencia al respecto con otras ayudas públicas no es muy positiva– y a partir del momento en que la reciban», que suele demorarse en el tiempo.
ENCARECIMIENTO DE PRODUCTOS
Volviendo a la rebaja del IVA, Fedea también advierte en la introducción del artículo que esta medida puede tener «un elevado coste de eficiencia», ya que, al abaratar el precio de determinados bienes y servicios, «encarece relativamente el precio de otros no beneficiados por la rebaja, lo que puede modificar los comportamientos de los consumidores (y de los productores), haciendo variar las cantidades demandadas de bienes y servicios de acuerdo con sus preferencias a la hora de componer la cesta de consumo».
«El impacto real de la rebaja sobre los precios pagados por los consumidores va a depender del grado efectivo de traslación, determinado por las elasticidades-precio de oferta y demanda del bien afectado y por las elasticidades cruzadas con el resto de bienes y factores productivos. No puede descartarse, por tanto, que, al menos en parte, la reducción acabe trasladándose a una mejora de los márgenes empresariales», señala el documento.