Demuestran que el aceite de semilla de albahaca es una fuente saludable de omega-3
MADRID, 25 (SERVIMEDIA)
Un equipo multidisciplinar de investigadores de la Universidad de Granada (UGR), en colaboración con la Fundación Cellbitec de Almería, ha comprobado que el aceite de semilla de albahaca es una nueva fuente de ácidos grasos omega-3 con propiedades saludables y beneficios para su consumo.
La albahaca (‘Ocimumbasilicum’) es una hierba ampliamente conocida por sus propiedades aromáticas y por el uso de sus hojas frescas en restauración. Sin embargo, hasta ahora poco se conocía sobre las propiedades nutricionales de su semilla.
El aceite extraído de ésta ha sido descrito por ser una excelente fuente (hasta un 75% del total de ácidos grasos) de ácido-linolénico, un ácido graso perteneciente a la serie omega-3. Además, el ácido linoleico (serie omega-6) puede llegar a conformar hasta un 15% del total de sus ácidos grasos.
Uno de los aspectos más importantes que se ha tenido en cuenta en este trabajo ha sido conocer la biodisponibilidad real de sus ácidos grasos constituyentes, así como su capacidad para transformarse e incorporarse como ácidos grasos de cadena larga en los diferentes compartimentos del organismo.
Los científicos han demostrado que el ácido linolénico procedente de la semilla de albahaca se absorbe a nivel digestivo y se transforma e incorpora en los diferentes tejidos en otros ácidos grasos, como los ya conocidos por sus propiedades beneficiosas para la salud como el ácido docosahexaenoico o DHA y el ácido eicosapentaenoico o EPA.
«Todos estos resultados hacen que este aceite sea ideal como suplemento dietético, como un nuevo alimento funcional o constituyente de fórmulas nutracéuticas, para su uso por la población general o en el tratamiento específico de distintas patologías con base inflamatoria como la obesidad, el síndrome metabólico o el cáncer de colon, entre otras», explican los autores.
Este trabajo, ha sido liderado por los investigadores del departamento de Fisiología de la UGR Jesús María Porres Foulquie y María López-Jurado, pertenecientes al Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos y el Centro de Investigación Biomédica, y los investigadores del departamento de Anatomía y Embriología Humana, Consolación Melguizo Alonso y José Carlos Prados Salazar, del Centro de Investigación Biomédica e Instituto Biosanitario de Granada.